Una de las principales razones por las que quería visitar Bolivia era para conocer el Salar de Uyuni. Es realmente increíble. El tour lo tomé desde La Paz con una agencia que se llama Turismo Bolivia Peru, incluía el transporte terrestre de La Paz a Uyuni y tres días para recorrer el Salar de Uyuni, el Desierto Siloli y las lagunas antiplánicas. El recorrido en bus de La Paz a Uyuni es operado por una agencia que se llama Todo Turismo, muy recomendado. Los buses son bastante cómodos, las sillas son semi-cama y uno puede dormir todo el recorrido. Le ofrecen a uno una cena ligera, agua y un sandwich de desayuno. El recorrido no es mareador, o por lo menos, yo no lo sentí. El bus de La Paz a Uyuni sale a las 9pm y está llegando sobre las 7am; de Uyuni sale a las 8pm y llega a la Paz hacia las 6am.
Una vez en Uyuni, el tour comienza hacia las 11am. Mi grupo estaba conformado por dos chicas mexicanas un chico Indio y una pereja de Escocia, ella de orígen Indio. Creo que tener compañeros de viaje Indios, no fue del todo una coincidencia, ja ja ja. Lo primero que se visita es el cementerio de trenes y de ahi se va al Salar. El cementerio de trenes no me pareció mayor cosa, pero es una parada que hacen en todos los recorridos. En el Salar se hacen varias paradas, en varios puntos. Es muy lindo ver como el azul del cielo se confunde con el azúl que se refleja en el Salar. Eso si, el recorrido es bastante largo, ya que hay que ir muy lento porque como es época de lluvia, hay mucha agua.
El día que visitamos el Salar llegamos al refugio a donde nos ibamos a hospedar cerca de las 8:30pm, muy cansados pero listos para seguir conociendo. El refugio donde nos hospedamos me gustó mucho, se llama San Juan del Rosario. Yo había pedido habitación con baño propio y la verdad creo que es mucho mejor, ya que sino hay que compartir el baño y pagar 15 o 20 Bolivianos por la ducha con agua caliente. El costo adicional por tener habitacion con baño privado fue del 70USD, pero la verdad creo que vale la pena. La comida en el hostal estuvo muy rica y las habitaciones muy bien tenidas, limpias y cómodas. Al siguiente día salimos a recorrer las lagunas antiplánicas y el desierto Siloli. Aunque el recorrido de este segundo día es agotador porque pasa uno mucho tiempo en la camioneta, los paisajes son muy lindos. A mí, la verdad, me gustó mucho esta parte del recorrido. Este día se visitan diferentes lagunas, las cuales tienen muchos flamingos. Durante el recorrido, uno de los sitios que más me gustó es el mirador del volcán Ollague, ¡super chévere!
El último día lo comenzamos muy temprano, 4:30am, porque debíamos dejar a 3 personas del grupo a las 9am en la frontera con Chile para que siguieran su recorrido. Ese día, uno se podía bañar en las aguas termales, pero yo no tenía ganas, no me parecieron tan chéveres, la verdad. Después pasamos por el desierto Dalí, se llama así porque parece un cuadro de Dalí y finalmente llegamos a la frontera con Chile. De ahí a Uyuni, el recorrido es largo, aunque se hacen varias paradas. La parada que más me gustó fue la de la Laguna Escondida.
En general, los tres días estuvieron increíbles.